lunes, 23 de marzo de 2015

CARTA A UN AMOR


Hoy te escribo nuevamente a pesar de haber prometido no hacerlo nunca más, pero fue imposible no hacerlo. Hoy tus recuerdos llegaron a mí. ¡Ja que estúpido fui al creer que ya te había olvidado!, pero hoy me di cuenta que aún no lo he podido hacer, y es que la verdad ahora pienso que será imposible hacerlo, no entiendo como después de dos años de tu partida no pude lograr olvidarte, no lo sé estoy muy confundido, en verdad creí que ya te había olvidado, pues ya no estabas en mis sueños, ya no sentía nada al pronunciar o escuchar tu nombre, ni mucho menos pensaba en ti, pero hoy, justamente hoy, esta fecha me hizo recordarte.
Sé que prometimos no volver hacerlo, y sé también que el día en que te marchaste prometí olvidarte sacarte de mi mente, y que iniciaría una nueva vida lejos de ti y de tus recuerdos, pero aunque lo he hecho creo que eso de olvidarte nunca lo voy a poder hacer o por lo menos no para siempre. Es fácil anestesiar el corazón por unos cuantos años, pero siempre llegara el día en que se terminara el efecto y volverán a mi todos esos recuerdos, como me ha pasado hoy. Pues este día era el más importante para nosotros, siempre celebrábamos un día año más de conocernos, y te juro que es inevitable no llorar, al recordar todas aquellas cosas que pasamos juntos tu y yo, si solo tú y yo, porque cuando estábamos juntos no existía nadie más, nos sumergíamos tanto en nuestro mundo, que formábamos ilusiones, todo el mundo era solo para nosotros dos, podíamos viajar de parís a roma, te Italia a España, podíamos ir a cualquier lugar que nosotros quisiéramos, solo bastaba cerrar los ojos y decidir a donde iríamos esta vez. Recuerdo que nuestro último aniversario, decidimos no ir a ningún lugar lejano y preferimos mejor disfrutar de un día de campo normal, uno en el que estaríamos todo el día juntos, acostados en el pasto, disfrutando de la sombra de los árboles, e imaginando figuran en las nubes, recuerdo que ese día mantuve tu cabeza sobre mi pecho, pues sabía que eso te encantaba, principalmente porque en ese lugar podías escuchar cada uno de mis latidos, y sentir como se aceleraba con que solo me dijeras una palabra de amor, eso te encantaba, siempre decías que era impresionante que mi corazón no saltara de mi pecho de lo fuerte que latía, ese lugar era tu preferido y el mío también, pues desde ahí mi mano lograba rodear completamente tu cintura, ese día fue el mejor y el ultimo más feliz.
También recuerdo esos meses de diciembre y enero, esos días de inmenso frio en el que la nieve cubría por completo las calles y las casas, siempre pedíamos nuestras vacaciones en aquellos días para poder pasar todo el día juntos en la cama, acurrucados como dos pajaritos en su nido, recuerdo que solo nos levantábamos para comer, bañarnos y hacer otras cuantas cosillas, ¡jajá éramos como dos osos invernando! Aunque no pasábamos todo el día dormidos como los verdaderos osos pero si no la pasábamos la mayor parte del día acostados, y los viernes, los viernes eras los días perfectos para ver películas, a ti te encantaban las películas de terror, aunque siempre terminaras escondida bajo mi brazo en las escenas de suspenso, claro yo aprovechaba de esas circunstancias para abrasarte y sentir tu suave piel, y por mi parte a mí me gustaban más las películas de acción o esas mágicas que te envuelven en la historia, esos días eran perfectos para los dos.
Pero ahora de todo eso ya no me queda nada, después de ti mi mundo se sumergió en un lago de soledad, ya no disfruto de los días como lo hacía antes, pues mis días nunca serán lo mismo sin ti, y aunque he conocido a muchas chicas más, debo admitir que ninguna de ellas nunca podrá igualarte. Creo que lo mejor será, resignarme a poder ser feliz, y acostumbrarme a esta vida sin ti,  y como ahora entiendo que es verdad que “dicen que la vida sigue, pero no siempre es así, a veces la vida no sigue, a veces solo pasan los días”, y es cierto ahora solo pasan los días, pero mi vida, mi vida se quedó en el día de tu partida, ahí se quedó estancada, después de ese día solo vivo por que no tengo el valor suficiente para quitarme la vida y terminar con esto de una vez, y aunque siempre trato de mantener una sonrisa en mi rostro, aunque rio de los chistes de los demás, solo lo hago para que no se den cuenta que por dentro estoy destrozado, estoy desecho en mil pedazos, a veces quisiera llorar cantaros, pero me resisto a no hacerlo frente a todos, aunque al parecer hoy se roto la barrera que sostenía toda esa presa de lágrimas que había retenido por todos estos días, hoy lluevo como una tormenta incontrolable, ahora entiendo que estos años que pasaron lo único que hice fue engañarme a mí mismo, creí que podía cumplir mi última promesa que te hice pero creo que he vuelto a fallarte, nuevamente no pude cumplir mi promesa, ahora sé que nunca fui tan fuerte como creía serlo.
Aun quisiera decirte tantas cosas pero sé que esta carta nunca llegara a tus manos, pero quiero que sepas que a pesar de tanto tiempo sin ti aun te amo como la primera vez, con esa intensidad que te volvía loca, y ahora solo espero que en donde estés seas feliz y estés bien, sé que habíamos prometido nunca separarnos pero el destino formo caminos separados para cada uno, pero tengo la certeza seguridad de que algún día volveremos a estar juntos, realmente eso espero.
Hoy con estas lágrimas que he convertido en letras me despido de ti amor mío, seguiré esperando a que llegue el día en que volveremos a estar juntos, de hoy en adelante dejare de intentar olvidarte y viviré con tus recuerdos en mi corazón hasta que deje de latir, hasta que por fin mi camino se dirija a donde estás tú, hasta llegar al cielo para vivir una eternidad juntos, solo tú y yo como antes.
 PD: Descansa en paz mi dulce princesa, nunca te olvidare y cumpliré mi promesa de amarte por siempre, TE AMO.



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